“Trump no es el único racista, es solo uno”, dijo Residente en Nueva York en una presentación reciente de este proyecto basado en una prueba de su ADN. “Creo que el tema ... ahora es aún más relevante por lo que está pasando con Trump y no solo con Trump, porque hay mucho racismo alrededor del mundo”, agregó.
“Quizás esto haga que la gente quiera hacerse una prueba de ADN y quizás puedan ver que vinieron de una mujer negra, pues todos venimos de Kenia”, añadió el artista, cuyo verdadero nombre es René Pérez.
Residente, el álbum que está a la venta desde ayer, incluye 13 piezas que el músico compuso y grabó a lo largo de dos años, mientras recorría algunos de los países originarios de sus ancestros, según la prueba genética que se hizo.
Empezó por Siberia, en Rusia, y también visitó China, así como Burkina Faso, Ghana y Níger, en África Occidental, y Armenia, Georgia y Osetia en la zona del Cáucaso.
El documental homónimo, dirigido por el propio Pérez, comienza con su niñez en Puerto Rico, sus dificultades como un joven estudiante y su ascenso con el grupo Calle 13, antes de seguirlo en la creación de este ambicioso proyecto en solitario. El filme se estrenó este mes en South by Southwest y de acuerdo con sus representantes próximamente se exhibirá en otros festivales, aún por anunciarse.
En este cuenta que decidió dejar Calle 13 estando en la cumbre del éxito porque sintió que necesitaba hacer otra cosa para encontrar inspiración, y así fue como se dio a la tarea de emprender su viaje, donde compartió con artistas locales mayormente amateur o desconocidos, muchos de los cuales viven en condiciones de pobreza o han sido afectados por la guerra. Pese a emprender su carrera como solista, el artista indicó que “mientras mi hermano (Visitante, Eduardo Cabra Martínez) y yo estemos vivos, Calle 13 existe”.
“Este no es un álbum de World Music”, señaló en su encuentro reciente con la prensa, en el que habló en inglés. “Viajé por el mundo, pero quería hacer algo nuevo”.
En China trabajó con la Ópera de Pekín, considerada una de las máximas expresiones de la cultura del país, desafiando a un grupo de intérpretes a salirse de su zona de confort y ponerle melodía a las letras que él había escrito.
Dijo que cuando comenzó su travesía lo hizo pensando más bien en la música, pero que escuchar las historias de las personas que iba conociendo lo llevó a pensar más en el tema de la raza. (E)